Todos compartimos algunos ¨secretos¨ y no tan secretos para el mejor cuidado de nuestras plantas. Hay infinidad de consejos o tips que hemos escuchado o leído muchísimas veces de parte de los que saben. Pero algunas de estas creencias se repiten indefinidamente sin una base científica que las sustente. Y lo que es peor, en muchos casos la realidad es que no solo son inefectivas, sino que resultan contraproducentes. Hablaremos de las 15 principales mentiras sobre las plantas, aunque hay otras dando vuelta por ahí.
Por increíble que parezca, éstas mentiras están difundidas por todo el mundo. Y seguirán propagándose por muchos años más…
1º: Las plantas en una habitación nos quitan el aire que necesitamos para respirar durante la noche: FALSO
Si bien las plantas consumen oxígeno como parte de su proceso de producción de hidratos de carbono, la verdad es que necesitan unas 500 veces menos oxígeno que los humanos.
Por otra parte, no solo lo obtienen del aire, sino también del agua de la tierra.
Nadie se murió por dormir con plantas, pero sí por escapes de monóxido de carbono.
2º: Podemos combatir cualquier plaga con un pesticida: FALSO
No existe un plaguicida universal, que pueda controlar cualquier tipo de plaga. Por lo general la gente cree que las plagas se matan con un mismo veneno.
En realidad, existen diferentes tipos de plagas (insectos, ácaros, moluscos, nematodos, etc.). Y muchos insecticidas, acaricidas, molusquicidas, nematicidas, con diferentes espectros de acción. Entonces, primero identificar cuál es la plaga que queremos combatir y en base a eso conseguir el producto adecuado.
Si te interesa saber más sobre insecticidas, mirá esta nota.
3º: Cuanto más abono o fertilizante, mejor para las plantas: FALSO
Las plantas requieren una cierta dosis de abono o fertilizante, y cualquier exceso no solo no será necesario sino que puede ser contraproducente.
Por ejemplo, cantidades excesivas de nitrógeno producen un crecimiento acelerado, con plantas débiles y propensas a enfermedades y ataques de plagas. Estas plantas no tienen la resistencia necesaria para hacer frente a esas adversidades y serán más débiles.
Los excesos de nutrientes son generalmente tóxicos y pueden llevar las plantas a la muerte, por lo que debemos utilizar las dosis aconsejadas.
4º: Cuanta más agua, mejor para la plantas: FALSO
Si bien las plantas de exterior necesitan mucha más agua que las de interior, como siempre decimos, debemos regarla de acuerdo a sus necesidades. Factores como la especie, el tamaño, la exposición al sol, el sustrato y la época del año deben ser tenidos en cuenta a la hora de regar.
En cuanto a las plantas de interior, la historia es otra, porque necesitan mucho menos riego. Hay personas que se sorprenden cuando se les dice que no necesitan regar sus plantas de interior todos los días.
Aquí se debe tener en cuenta el tipo de planta, de maceta (con o sin drenaje), la exposición al sol, y la cantidad de agua a usar. Éstos son los principales factores a considerar para darle a las plantas el agua necesaria.
Debemos tener en cuenta que el 99% de las muertes de las plantas de interior se debe a excesos de riego…
5º: Agregar clavos a la tierra libera hierro como nutriente: FALSO
Esta es una creencia muy difundida, pero la verdad es que las plantas jamás podrán extraer hierro de los clavos oxidados de la tierra.
El hierro debe ser proporcionado (en el caso que la planta lo necesite) de una forma asimilable para el suelo y la planta. Por ejemplo, con un fertilizante específicamente preparado para tal fin.
Entre estos productos tenemos, por ejemplo el Sulfato de Hierro o el Quelato de hierro. Estos fertilizantes tienen formulaciones que están preparadas para que las raíces o las hojas de las plantas puedan absorber el hierro y son los indicados para nuestras plantas.
6º: Agregar unas gotas de lavandina o lejía en el agua mantiene por más tiempo las flores de corte: VERDADERO
En realidad, lo que hace la lavandina o lejía es mantener el agua más limpia por más tiempo, pero lo recomendable es cambiar el agua diariamente. Si hacemos esto, el efecto de las gotas no será tan notorio.
Otra opción es poner una aspirina en el agua del florero, que también ayuda a mantener el agua más limpia por más tiempo.
Una buena práctica consiste en cortar los tallos de las flores un poco cada día, con el cambio de agua, ya que absorben agua por los mismos y con los días se van deteriorando. Mejor aún es cortarlos en bisel, para aumentar la superficie de absorción de agua.
7º: Agregar cáscaras de huevo a la tierra proporciona calcio: FALSO
Otra de las creencias más difundidas es que la cáscara de huevo mejora el sustrato al aportar mucho calcio, pero en realidad contiene muy pocas cantidades de este nutriente.
Además, para que se libere en el suelo debe primero descomponerse, y es un proceso que puede llevar décadas, por lo que una deficiencia de calcio nunca se solucionará con cáscaras de huevo.
Por último, las cáscaras de huevo tampoco son un impedimento para el ataque de babosas y caracoles (otro mito).
8º: Siempre conviene trasplantar una planta a una maceta más grande: FALSO
En realidad, no en todos los casos es un falso mito, pero debemos ser cuidadosos. En plantas de exterior generalmente será beneficioso un trasplante (bien efectuado) a una maceta más grande.
Pero con las plantas de interior no necesariamente es el caso. Aquí nada podemos hacer para hacer que crezcan más rápido, ya que su crecimiento es más lento.
Un trasplante es siempre una situación que genera estrés en una planta, especialmente de interior y en maceta. Lo recomendable es acompañar el crecimiento de la misma y hacer un cambio de maceta cuando lo necesite.
9º: Agregar restos de café, té o yerba mejoran la fertilidad del sustrato: FALSO
Si necesitamos mejorar la fertilidad de un suelo no podemos depender de restos de café y té o yerba. Contienen nutrientes en muy escasa cantidad y no son rápidamente disponibles para las plantas.
Lo que debemos hacer, luego de un estudio de fertilidad del suelo, es aplicar los fertilizantes que tengan los nutrientes necesarios. O si utilizamos sustratos o mezclas ya preparados, asegurarnos de que sean de buena calidad.
10º: Remover o cambiar la tierra de las macetas mejora el crecimiento de las plantas: FALSO
Este es otro de los mitos más difundidos y difíciles de erradicar. En muchos casos, sobre todo en plantas de interior. ¨Cambiar¨ la tierra implicaría sacar toda la tierra de una maceta, sacando las plantas con sus raíces y provocándoles un sufrimiento innecesario.
Si usamos un buen sustrato nunca será necesario remover la tierra. Solo deberemos agregar un poco más cuando haga falta. El agua filtrará sin problemas si, además, regamos solo lo necesario.
Pero si hubiere la necesidad, solo podríamos remover la superficie de la tierra, unos pocos centímetros. Y peor aún sería intentar ir más allá y remover el sustrato que está mezclado con las raíces, ya que podríamos dañarlas considerablemente y agravar la situación.
Cambiar la tierra, en realidad, es un error de concepto. No se cambia la tierra (o sustrato), sino que se le agrega más a la maceta.
Hay que tener en cuenta, además, que sí puede ser necesario es agregar sustrato cuando se realiza un trasplante a una maceta más grande.
11º: La mejor época para trasplantar es en invierno: FALSO
En realidad, para plantas de exterior la mejor época es a comienzos de primavera, cuando su sistema radicular comienza a activarse y la planta toda reinicia su desarrollo.
Pero la mayoría de las plantas de exterior de jardines puede trasplantarse casi en cualquier época del año (excepto en plano verano, salvo que sea bajo circunstancias favorables).
En el caso delas plantas de interior, cualquier época del años es propicia, ya que no tienen fases de inactividad.
12º: Las plantas deben podarse una vez al año: FALSO
La verdad es que no siempre es así. En árboles, plantas arbustivas o plantines de temporada podremos tener que realizar una poda, pero no siempre será esencial.
Y en el caso de las plantas de interior, las podas que se realizan tienen solo una función estética (quitar hojas en mal estado, recortar brotes con exceso de crecimiento, etc.), por lo que no siempre se necesita una poda.
13º: Cuando llueve, lo mejor para las plantas en maceta es sacarlas al exterior: FALSO
Por más que parezca increíble, no siempre el agua de lluvia es beneficiosa.
Si bien es más sana para las plantas, ya que no contiene sales, si ponemos una planta que está en una maceta sin drenaje o salida de agua bajo la lluvia, no lograremos nada bueno. Lo único que conseguiremos en inundarla, ahogar sus raíces y matarla en poco tiempo.
14º: Las plantas de interior se benefician con la luz directa del sol: FALSO
Para comenzar, las plantas llamadas ¨de interior¨ son propias de lugares protegidos del sol directo, y suelen estar ubicadas debajo de plantas más grandes. Es decir, en realidad son de exterior, pero de lugares protegidos del sol directo.
Los rayos del sol en veranos muy cálidos podrían quemar sus hojas, dañando las plantas, por lo que debemos tener cuidado.
Una cosa es exponer una planta de interior al sol del invierno, que puede ser beneficioso, y otra a sol de verano, que puede ser fatal.
15º: Los pesticidas de origen químicos son los más eficaces para el control de plagas: FALSO
No necesariamente, ya que en algunos casos, como en los ataques de Cochinilla, otros productos demuestran ser más prácticos. Por ejemplo, la tierra de Diatomeas, que contiene Silicio, es mucho más efectiva (e inocua) que cualquier químico y no genera resistencia. Otro insecticida sumamente poderoso (y orgánico) es el aceite de Neem.
Además, los productos químicos suelen ser letales para insectos benéficos y alteran el ecosistema, por lo que debemos priorizar el uso de los ecológicos.