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Guía Básica Para Cultivar Una Orquídea Siempre En Flor

Guía Básica Para Cultivar Una Orquídea Siempre En Flor

Sabemos que existen miles de variedades e híbridos de Orquídeas, y cada una tiene diferente grado de complejidad. Si bien ninguna es tan fácil de mantener como para no requerir de cuidados, existen algunas que son aptas para principiantes. Aquí hablaremos de las Phalaenopsis, la clase de Orquídeas más conocida en todo el mundo.

Guía Básica Cultivar Una Orquídea Siempre En Flor


¿Qué Es Una Orquídea?

Las Orquídeas, especies cuyo nombre científico es Orchidaceae, son una familia de aproximadamente 800 géneros y más de 25000 especies (y más de 60.000 híbridos producidos por los productores).

Partes de la flor de una Orquídea
Partes principales de una flor de Orquídea

Un rasgo notable de las flores de las Orquídeas es la simetría bilateral de sus flores, en las que la pieza media del verticilo interno de tépalos (labelo) tiene una forma muy diferente. Los estambres, además, están fusionados al estilo de la flor, en la base principalmente.


La Orquídea Phalaenopsis (O Mariposa)

Esta clase de Orquídeas es conocida también como Mariposa. Existen más de 60 especies diferentes y son naturales del Sudeste Asiático.

Estas Orquídeas Mariposa, del griego phalaina (mariposa) y opsis (parecido), son las más cultivadas comercialmente en todo el mundo. Esto se debe, principalmente a que se las conoce desde el siglo XIX en los jardines Victorianos.

Guía Básica Cultivar Una Orquídea Phalaenopsis Siempre En Flor
La Orquídea Phalaenopsis es tan bella como sencilla de cultivar

Su crecimiento es del tipo monopodial, es decir, crecen a partir de un solo punto (tienen un solo tallo) y las hojas crecen en forma alternada.

Son plantas epífitas, es decir que se apoyan sobre otras plantas o estructuras aunque sin parasitarlas nutricionalmente. En su hábitat natural se las suele ver sobre árboles, por lo que no necesitan el suelo para enraizar y se las conoce como plantas ¨aéreas¨.

La floración de la Phalaenopsis es lateral y muy vistosa, de larga duración (puede permanecer intacta por hasta casi tres meses).

La flor presenta siempre tres sépalos idénticos y tres pétalos, el inferior modificado es llamado labelo, casi siempre tri-lobulado.

El labelo tiene coloración diferente y llamativa, es alargado y tiene dos apéndices apicales, cilios, vellosidades o una combinación de estas estructuras.

Sus hojas son alargadas y de color verde oscuro, lisas y grandes.


Guía Básica Para Cultivar La Orquídea Phalaenopsis


Sustrato

Como toda planta epífita, necesita que las raíces puedan respirar libremente, por lo que el sustrato nunca debe ser tierra como la conocemos para las plantas de maceta comunes.

El más común e indicado para las Orquídeas como las Phalaenopsis es la corteza de pino de corte fino, que le proporciona suficiente porosidad al medio.

Sustrato de corteza de pino
La corteza de pino es un excelente sustrato para las Orquídeas

Por lo general, el envase o maceta en el que vienen es transparente, ya que al tener raíces con clorofila, que pueden realizar la fotosíntesis, lo ideal es que puedan captar la luz del sol.

Maceta transparente para Orquídeas
Maceta de plástico transparente para Orquídeas

Lo recomendable es cambiarle el sustrato (que con el tiempo se va degradando al descomponerse) y aprovechar para recortar las raíces que están en mal estado.


Luz

Requiere buena luminosidad, pero nada de sol directo, que puede quemar o aclarar demasiado las hojas.

Un buen lugar puede ser cerca de una ventana, donde obtenga luz durante la mañana.

Las Orquídeas pueden ser unas de las 10 plantas de Interior con flores que pueden alegrar tu hogar
Un ambiente luminoso favorecerá el crecimiento de las Orquídeas

En invierno puede recibir algo de luz solar directa, pero nunca en verano.

Si la luz es insuficiente, las hojas tienden a oscurecerse.


Humedad Ambiente

Son plantas de lugares con alta humedad relativa. Por ende, no conviene (como a la mayoría de las plantas) ubicarla cerca de fuentes de aire acondicionado, que secan en exceso el ambiente.

También debemos cuidar de no dejarlas en un balcón donde sople mucho viento seco, ya que puede sufrir deshidratación, sobre todo en verano.

Guía Básica Cultivar Una Orquídea Siempre En Flor
Es importante alejar las Orquideas de las fuentes de aire seco, como un aire acondicionado o estufa.

Una buena idea es dejarles cerca platos con agua y piedritas, para que al evaporarse humidifique el entorno de la Phalaenopsis. Pero no ubicar la maceta sobre esos platos.

Podemos rociarlas con agua para proporcionales más humedad ambiente, pero nunca mojemos la flores, ya que podríamos mancharlas.


Riego

Las raíces de las orquídeas no están acostumbradas a vivir sumergidas en agua, o en un sustrato muy húmedo. En su ambiente natural crecen sobre otras plantas, por lo que sus raíces reciben mucho oxígeno.

Aprovechan el agua de lluvia que se escurre por las ramas y follaje de los árboles, es decir, no necesitan mucha agua de forma continua.

Para saber cuánto hay que regar, tenemos que considerar varios factores.

Por ejemplo: la temperatura ambiente, la ventilación, la luminosidad, y el tamaño de la maceta. Además, el tamaño de la planta, el tipo de sustrato y el período de crecimiento de la planta.

No es prudente establecer una fórmula ¨ideal¨ para el riego, ya que como vemos depende de muchas variables. Pero lo importante es que conozcas algunos puntos:

Los excesos de agua son muy negativos para estas orquídeas, ya que podemos pudrir las raíces. Solo debemos regarlas cuando los primeros centímetros del sustrato estén bien secos.

A la hora de regar es fundamental que el sustrato se moje bien, por lo que hay que darles mucha agua, y lo más importante es que drene completamente el agua.

El riego en las Orquídeas. Guía Básica Cultivar Una Orquídea Siempre En Flor
Cuando las raíces se tornan verde claro es señal de que hay que regar

Las raíces toman un color grisáceo cuando la planta está falta de agua, para tornarse verdes cuando están suficientemente hidratadas.

Consejos Importantes

  • No debemos usar agua fría para regar esta orquídea, sino agua templada. Las orquídeas necesitan agua de calidad. No soportan las aguas duras ni cloradas.
  • Como regla aproximada, podemos decir que hay que regar dos o tres veces por semana en verano. Y una vez cada semana o cada quince días en invierno. Y lo importante es que es preferible que le falte agua a que le sobre, ya que ante la falta puede recuperarse.
  • Es mejor siempre preferible regarlas por la mañana. Si regamos por la tarde y se mojan algunas hojas, podrían desarrollarse hongos en la noche.
  • Se la puede regar desde arriba, como tradicionalmente se hace con las plantas de maceta, o podemos, con mucho cuidado, sumergirlas en un recipiente grande con agua.
  • Se debe regar menos cuando la planta deja de florecer, para luego aumentar la cantidad de agua cuando retoma la floración.
  • Siempre debe escurrir el agua en exceso, dejando que drene bien antes de volverla a ubicar en su lugar. Nunca conviene dejar la planta bajo un plato con agua, ya que terminará pudriéndola.

Fertilización

Lo ideal es fertilizar estas plantas cada quince o veinte días, con fertilizantes para orquídeas. Estos están formulados con nutrientes en una combinación que les ayude a las Orquídeas a desarrollar su forma vegetativa y reproductiva (las flores) de la manera más eficiente.

Por lo general vienen preparados en líquidos que se diluyen en el agua de riego.

Fertilizante para Orquídeas marca Terrafértil
Fertilizante líquido para Orquídeas, que se diluye en el agua de riego

Como dijimos con el riego, podemos disminuir la fertilización (y hacerlo una vez al mes) cuando no haya flores, para volver a aumentarla cuando comiencen a aparecer las mismas.

Siempre conviene respetar las indicaciones del producto, para no generar toxicidad en la planta por exceso de nutrientes.


Podas y Nueva Floración

Cuando se pierdan las flores, tenemos dos opciones.

Una de ellas es esperar que algunas de las yemas latentes de las varas florales produzcan un nuevo brote y nos den una segunda floración (más reducida que la primera).

Otra posibilidad es que cortemos la vara floral un poco más arriba el segundo nudo, para de esta manera, si seguimos estas indicaciones, generar una nueva floración.

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