Muchas veces nuestras plantas son afectadas por plagas animales que causan pérdida de vigor, valor comercial o incluso la muerte. Pero en ocasiones el causante de los males puede tener otro origen: las enfermedades. Y dentro de las enfermedades de las plantas, están las causadas por las Bacterias, y aquí veremos cómo son y su control.
¿Qué Es Una Enfermedad?
Una enfermedad puede definirse como una alteración de la morfología y la fisiología de la planta ocasionada por agentes patógenos parasitarios y no parasitarios.
Dentro de las enfermedades parasitarias en plantas, tenemos:
- Virus
- Bacterias
- Hongos
También tenemos enfermedades no parasitarias, que pueden ser causadas por:
- Excesos o falta de Agua
- Temperaturas extremas
- Excesos o carencia de Nutrientes
¿Qué Es Una Bacteria?
Son organismos microscópicos de muy reducidas dimensiones y de constitución extremadamente simple, ya que consisten en sólo una célula.
Se encuentran en cualquier parte posible, y están sobre las plantas, animales, objetos, tierra y agua.
Son los seres vivos más antiguos y abundantes de nuestro planeta, y algunos son capaces de enfermar a nuestras plantas.
Por definición, son organismos Procariotas, lo que significa que no tienen un núcleo celular. Como parásitos de las plantas no son tan comunes como los hongos, pero pueden causar graves problemas también.
A diferencia de los Virus, son capaces por sí solos de llevar a cabo todas sus funciones vitales, aunque la mayoría son de alimentación heterófaga. Es decir, necesitan de otro organismo vivo para sobrevivir.
La gran mayoría de las bacterias fitópatógenas son aeróbicas, necesitan del aire para vivir.
Su reproducción también es muy simple, ya que lo hacen por partición binaria, y tienen formas variables: esféricas, filamentosas, espiraloides o alargados.
Morfología De Las Bacterias De Las Plantas
Estos diminutos seres tienen una pared celular que recubre la célula por fuera de la membrana, y a veces flagelos, que le permiten desplazarse.
Llevan en su interior ADN y ribosomas, lo que les permite multiplicarse. Se estima que una bacteria puede formar otra igual en unos quince a treinta minutos, en condiciones favorables.
A diferencia de los Eucariontes (organismos más evolucionados que poseen núcleo en sus células), sólo tienen una región nuclear.
La membrana celular es de suma importancia en las bacterias, ya que permite el pasaje de sustancias nutrientes hacia el interior y de los desechos al exterior. Además, interviene en la respiración. La pared celular es más gruesa y rígida que la membrana, y determina la forma de la bacteria.
Algunas de las bacterias que atacan a las plantas están rodeadas por una cubierta exterior gelatinosa que cubre la célula y está siempre presente.
Por lo general poseen cilias o flagelos, de longitud mucho mayor que la célula y que les permite desplazarse. También suelen tener pelos en su exterior, de menores dimensiones que los flagelos.
Las bacterias tienen la capacidad de generar endosporas desde su interior, las que se rodean de una espesa pared celular. Éstas son capaces de permanecer en estado latente soportando las más adversas condiciones de temperatura y humedad hasta que se presenten condiciones ambientales más favorables.
Fisiología De Las Bacterias De Las Plantas
Las bacterias que afectan a las plantas, como no poseen clorofila, deben proveerse de alimento parasitándolas.
Algunas son saprófitas, es decir que lo consiguen de la materia orgánica muerta o en descomposición. Absorben los nutrientes que necesitan a través de sus membranas celulares.
Como mencionamos antes, se multiplican por división celular, y la multiplicación de una bacteria sigue una curva en la que primero se observa un período de aclimatación. Luego viene una fase de rápida división celular en un período de pocas horas.
Le sigue una fase estacionaria por de agotamiento de nutrientes o acumulación de desechos, y por último una etapa en la que se produce una disminución de la colonia debido a la muerte de la mayoría de las bacterias.
Es notable que las bacterias no pueden atravesar la epidermis de las plantas, ya que está constituida por una pared espesa. Esto hace que deban recurrir a aberturas naturales, como los estomas, o artificiales, como heridas.
Debemos ser muy cuidadosos entonces al podar o trabajar con nuestras plantas para no lastimarlas y que son susceptibles al ataque bacteriano.
Tipos De Enfermedades De Bacterias
Las enfermedades producidas por las bacterias se llaman Bacteriosis, y se clasifican en:
- Vasculares: Las bacterias taponan los vasos de conducción de agua de las plantas, o Xilema, tanto por la presencia de ellas como de la mucosidad generada. Esta alteración en la circulación del agua produce marchitez y muerte. Un ejemplo notable ocurre en el Cáncer del Tomate (Corynebacterium michiganense).
- Parenquimáticas: aquí las bacterias penetran en los tejidos suculentos o parenquimáticos, pudiendo también avanzar hacia los tejidos vasculares cercanos. Producen manchas negras, necrosis, y a veces la podredumbre total de la planta. Un buen ejemplo es la Podredumbre húmeda de frutos y hortalizas (Erwinia carotovora)
- Hiperplásicas: son generadas por bacterias que producen tumores o tubérculos, debido al exceso de actividad celular. El género Agrobacterium es responsable de estas enfermedades, y como ejemplo podemos citar a Agrobacterium tumefaciens, que genera tumores en raíces de rosales y árboles jóvenes.
Métodos De Control De Bacterias
Para combatir ese enemigo invisible (que solo nos permite ver los síntomas de su accionar en las plantas) podemos recomendar:
- Eliminar malezas y realizar podas adecuadas en las plantas del jardín, para no ofrecer un exceso de vegetación que pueda ser propicio para el ataque de bacterias
- No fertilizar en exceso, sobre todo con Nitrógeno, ya que las plantas pueden crecer demasiado rápidamente pero sin la fortaleza adecuada, siendo más vulnerable al ataque de enfermedades
- Limpiar y desinfectar regularmente las herramientas de poda. Evitar la aparición de heridas, que pueden ser la puerta de entrada de las bacterias.
- Podar y eliminar las partes afectadas, y si hace falta, la planta entera, para evitar más contagios.
- Utilizar productos bactericidas a base de Oxicloruro de Cobre, que también tienen una acción funguicida.